Los enfadados
Las siete posiciones características de los enfadados :
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El 96% está a favor de imponer las herencias superiores a 1 millón de euros.
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El 89% está a favor de suprimir la subvención estatal a la Iglesia.
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El 81% está a favor de abolir la Monarquía para instaurar una República.
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El 81% se opone a la introducción de cursos feministas obligatorios en las escuelas.
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El 71% se opone a la transferencia de competencias a la Unión Europea.
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El 67% se opone a un referéndum pactado sobre la independencia de Cataluña.
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El 65% está a favor de prohibir la adopción por parejas homosexuales.
Sociología
Los enfadados son un grupo de hombres populares, no muy mayores, con pocas cualificaciones y procedentes en su mayoría del sur del país.
Los enfadados pertenecen definitivamente a las clases populares: el 46% de ellos ganan menos de 1.500 euros al mes y suelen ser poco cualificados. Entre ellos, se tiende a encontrar más empleados, obreros y personas inactivas. Es un grupo más bien rural, pero presente en las grandes ciudades y sobrerrepresentado en Andalucía y la región de Murcia. El 64% de los enfadados tiene menos de 50 años, y están especialmente bien representados en los grupos de mediana edad. También son poco religiosos.
Además, representan el 4% de la población española.
Sistema de opiniones
Los enfadados son conservadores, republicanos y pro-redistribución.
Los enfadados son antifeministas y conservadores en cuestiones sociales. Están mayoritariamente a favor de prohibir el cambio de sexo y la adopción por parejas homosexuales. Rechazan a los inmigrantes y son partidarios de más autoridad. Por eso quieren reinstaurar la pena de muerte para los asesinos de niños y quieren dar a la policía el derecho a disparar a las personas que les amenacen. En cuanto a la ecología y el animalismo, están más divididos, pero son anticorrida.
En particular, es el grupo que más se opone a la transferencia de competencias a la Unión Europea. Los enfadados desconfían y rechazan el sistema.
En materia económica, son muy favorables a los servicios públicos y apoyan el impuesto alcapital. En general, apoyan la redistribución.
También se acercan a los grupos de izquierda en su oposición a la monarquía y al clericalismo. Sin embargo, vuelven a distanciarse de ellos por su clara oposición a los nacionalismos periféricos y a la idea de un referéndum pactado sobre la independencia de Cataluña.
Orientaciones y temas electorales
Los enfadados votan muy poco, pero votan a la izquierda cuando lo hacen.
Los enfadados son muy abstencionistas: sólo el 32% está seguro de votar en las próximas elecciones generales.
A pesar de ello, cuando los enfadados votan, lo hacen mayoritariamente a la izquierda o Vox. En las generales de 2019, el 38% de ellos votó al PSOE-PSC y 18% votó a Vox, 11% a Unidas Podemos y 11% al PP. Para 2023, los rebeldes se perfilan como un grupo muy disputado, pero muy interesado en Sumar.